¿Qué es el fandom? ¿De dónde viene y cómo funciona? Ifeelbetter (2013) nos dá una introducción:
(...) Nadie es más crítico del arte que el fandom. Nadie es más capaz de investigar los matices de la expresión que el fandom -porque es una gran multitud de gente aportando recurso e ideas. fandom se trata de corregir los defectos y vicios del original. Esencialmente, se trata de protesta y rebelión. fandom es la voz de una turba que puede hacerlo mejor que el original, que a menudo va en contra de la original, que no aceptará nada menos de lo que el mejor medio (y el humano al timón) es capaz de ofrecer. fandom se trata de poner al debate y la conversación de nuevo en un proceso artístico -especialmente si el artista o autor en cuestión se ha vuelto tan vanidoso que toda crítica es ignorada, desconfiada, arrojada nuevamente a quien critica. (...) fandom es acerca de la expresión creativa mutua -no hay dioses en el fandom y cada vez que alguien piensa que se ha convertido en un dios del fandom, el fandom los vuelve a corregir. (...) fandom no necesita ningún permiso y, sin duda, no lo está esperando. (...) Y fandom, en realidad, no quiere su atención; a menudo, incluso prefiere que lo dejes tranquilo para que siga haciendo lo que está haciendo mejor de todas formas. (...)
(...)fandom es no adorar el altar del canon. fandom es re-construirlo porque puede hacerlo mejor (Ifeelbetter, 2013).
El boom del internet hizo explotar, entre muchas cosas, las formas en que interactuamos con el mundo y en que nos entretenemos. Muchas actividades se vieron transformadas gracias a este fenómeno, entre ellas las actividades de los fans o fanacs. Fanlore (2016, sección de fandom) define un fandom como: “(...) Una comunidad de fans, que participan en fanacs e interactúan de alguna manera, ya sea a través de discusiones u obras creativas. Esta interacción puede ser cara a cara, en eventos como convenciones, o comunicación escrita en línea”.
El término fandom comienza a ser utilizado por primera vez, históricamente documentado, por el Washington Post en una columna sobre aficionados deportivos. De ahí en adelante el uso de la palabra comienza a esparcirse y aplicarse en otros ámbitos; en 1920 y 1930 los aficionados de la ciencia ficción comenzaron a usar el término para referirse a las comunidades que comenzaban a formar.
De acuerdo a la página web fanlore.org, una página web basada en wikipedia, creada para y por fans, en la que se pretende recopilar la historia, medios y lore general del fandom; registran que una de las primeras menciones, de actividades fandomeras, se encuentra en el libro Mujercitas (Little Women) de Louisa May Alcott, publicado en 1868. En el libro, las protagonistas, las hermanas March, conforman un pequeño grupo de apreciación de Los Papeles del Club Pickwick de Charles Dickens, en el cual comparten sus propias versiones de la novela, con ficciones cortas y chistes o bromas y, en una nota, la misma autora Louisa May Alcott dice: “Me permito asegurar a mis lectores ([que] esto) es una copia de buena fe escrita, (érase) una vez, por unas niñas de buena fé"(fanlore, 2011).
Aunque esta es una de las primeras veces que dichas actividades aparecen registradas, la verdad es que se remontan casi al comienzo de la palabra escrita; todo depende de qué tan apegados estemos a los términos. Fanfiction, las creaciones literarias escritas por aficionados, por ejemplo, podríamos rastrearlas desde el Quijote de la Mancha (1605), pues Cervantes, un aficionado a las historias de caballería, terminó escribiendo su propia versión de estas historias; desde Jane Austen (1775-1817) podemos trazar obras aficionadas basadas en sus libros hasta sus sobrinas, quienes escribieron algunas casi simultáneamente y, algunas veces, en conjunto con la autora. Aficionados de Sherlock Holmes (1887) escribían sus propias conjeturas y soluciones a los crímenes y misterios propuestos por el autor escocés y los compartían con sus amigos y familiares cerca del 1900. Finalmente, alrededor de 1960 los fanzines de Star Trek, con innumerables historias escritas por aficionados, eran intercambiados entre los fans en las primeras convenciones masivas de ciencia ficción.
En el arte podríamos ver, en especial, el caso del arte religioso cristiano y el arte clásico, todas las imágenes creadas basándose en relatos, historias, mitos y registros bíblicos de los dioses, santos, héroes y vírgenes que representan.
De ahí en adelante podemos encontrar que estos grupos o clubes han ido aumentando junto los medios de comunicación masiva y los niveles de educación, a lo largo y ancho del mundo. En mi experiencia, creo, que fandom es la respuesta de una mente inquieta a aquello que llama su atención, aquello que apela a su gusto y le apasiona. Tras la explosión de los medios de comunicación masiva, la industria del entretenimiento pudo llegar a más personas y poco a poco el mundo de los aficionados se fue abriendo; hoy en día podemos encontrar una serie de televisión, una película, un cómic, un grupo o género musical casi para cualquier gusto, y si no existe en el mundo real, es casi seguro que en el fandom podrá encontrarse algo apto para cualquier gusto.
Debido a que los fandoms se mueven y amplían en tantas direcciones simultáneamente, es muy difícil encontrar estadísticas sobre ellos. Algunos fandoms tienen más producción de un tipo que de todos los demás, es decir, algunos fandoms tienen más producción audiovisual que escrita, por ejemplo; o utilizan más que todo una plataforma específica en lugar de otras, incluso cuando su producción es mayoritariamente de un tipo, como la escrita, un fandom en general podría preferir una plataforma a otra similar.
En mi investigación, no he podido encontrar una recopilación de información sobre fanart en internet, mayormente, creo yo, debido al hecho indicado anteriormente y, ya que éste no es un trabajo sobre un fandom específico, la tarea de recopilar datos se vuelve casi imposible. Aún así ya que, como explico en otros apartados de este documento, lo que sucede en un área de un fandom casi siempre sucede en otras áreas del mismo, por este motivo creo pertinente traer la información recopilada por dos investigaciones aunque éstas únicamente muestran estadísticas tomadas de plataformas dedicadas a la publicación de fanfiction (literatura escrita por fans) que podrán ser consultadas en el anexo 3.
Estas investigaciones revelan que de las personas que participan en actividades fandomeras como la escritura del fanfiction, de las que lo hacen en plataformas digitales, la mayoría son mujeres, seguido muy cerca por personas pertenecientes a una minoría sexual (lgbti) y una porción bastante pequeña son hombres. Una de las investigaciones indagó específicamente sobre las nacionalidades de las personas que participaron y encontró que, a una plataforma específica, acceden desde por lo menos 22 países. Ambas investigaciones se realizaron en el idioma inglés y encontraron que el 50% de sus participantes, aunque hablantes de otros idiomas, utilizan el inglés para interactuar en estas plataformas. Ambas investigaciones encontraron también que la mayoría de los usuarios (sin ninguna otra distinción) se encuentran entre los 13 y los 40 años de edad, entre los cuales los que publican y comentan más activamente están entre los 15 y los 25 años de edad.
Como dije antes, estos estudios únicamente miden a los usuarios de dos plataformas específicas usadas para compartir la literatura escrita por los fans (fanfiction). Realizar un estudio similar con el fanart sería una tarea casi inacabable, pues no hay realmente plataformas dedicadas exclusivamente a compartir trabajo artístico/visual creado por fans. Estas creaciones se comparten más bien como links a portafolios o páginas específicas de los artistas o redes sociales e incluso en otras plataformas diferentes a las aquí mencionadas, a veces un producto de este tipo sería compartido con un fic en específico.
Aún así, es generalmente aceptado que los miembros de un fandom que participan activamente en una actividad, en este caso el fanfiction, también lo hacen de otras actividades como el fanart y el fanvid (producción audiovisual creada por fans), entre otras, así que no estaría muy alejado de la realidad suponer que la información recopilada en los estudios anteriores es aplicable a todos los fandoms en todos sus ámbitos.
Es de vital importancia notar, una vez más, que estas investigaciones se realizaron en internet, en relación a plataformas digitales y, por lo tanto, los usuarios tienden a ser más bien jóvenes. Como se menciona en otras partes de este documento, hay fandoms que vienen desde el siglo XIX y aún hoy están activos de diferentes maneras (Sherlock, Austen, Wilde, entre otros; del siglo XX notamos Star Trek, Star Wars, Dr. Who y otros). Muchos de los miembros de estos fandoms, especialmente los de mayor edad, prefieren compartir sus creaciones en convenciones y otras formas físicas y, por lo tanto, muchos de ellos no han hecho parte de estas investigaciones. Un resumen de estas investigaciones puede encontrarse en el anexo 3 de esta monografía.